Rodolfo JM*
*
Cuando las arañas peludas del desierto de Sonora se aparean no es para reproducirse. La hembra forma un enorme huevo gris con manchas rosas, pegajoso. Más tarde el huevo se rompe y entre las grietas asoman decenas de pequeñas y translúcidas figuras humanas que la araña devorará sin dudarlo. Hay ocasiones en que una o dos de las figuritas humanas se salvan, corriendo, pero por lo general ninguna sobrevive.
*
Las arañas invisibles de los bosques de Toronto son las mejores tejedoras de las que se tiene noticia. Pequeñísimas, translúcidas y veloces, al tejer no parten del centro ni avanzan en espiral como el resto de los arácnidos. Las arañas invisibles realizan caprichosos recorridos que dan como resultado complicados tapices semejantes a fractales y otras extravagantes figuras geométricas. La gente del bosque dice que también tejen retratos de personas que viven en otras partes del mundo y que nunca han estado cerca de Canadá, así como paisajes de lugares desconocidos. Desafortunadamente su seda es la más frágil de todas las que hay (basta un soplo de viento para destruir la maravilla), y sólo son capaces de tejer una tela durante su corta vida.
*
Cuando Gregorio Samsa se despertó una mañana después de un sueño intranquilo, se encontró convertido en una enorme cucaracha que pataleaba en la tela de una todavía más enorme viuda negra.
*
Yo no le recomendaría bajar en esa aldea señor –me dice el capitán de la tripulación que contratamos para que nos lleve hasta donde se encuentra Kurtz-. Allí la gente adora a las arañas, ¿me entiende? Son sus dioses. Un escalofrío parece recorrer a la tripulación, algunos se persignan. Nosotros, usando los binoculares, alcanzamos a distinguir selva adentro: oscuras construcciones, humo de hogueras, estructuras de huesos y troncos semejando telarañas. Al pasar frente a la aldea todos en el barco guardamos silencio. Podemos sentir miles de ojos ocultos que nos observan desde la orilla.
Más información sobre Rodolfo JM, autor de Cariátide, en https://twitter.com/#!/RodolfoJM
No hay comentarios:
Publicar un comentario